La casa italiana Ferrari es una de las mayores leyendas del pasado, presente y futuro dentro del motor. Su logo, un caballo negro sobre fondo amarillo, es reconocido a nivel mundial y todo un símbolo de la fuerza y poder de esta escudería.

Es una de las marcas más prestigiosas del mundo, siendo 35 millones de dólares el precio más caro que se ha llegado a pagar por el modelo Ferrari 250 GTO.

Otra exclusividad se trata del modelo Enzo Ferrari, que fue creado en 2002 y cuenta solo con 400 ejemplares por todo el mundo.

La fabricación de los primeros Ferrari

Su fundador, Enzo Ferrari nació en Módena, en 1898. A los 10 años vió su primera carrera de autos y desde entonces se volvió su estilo de vida. Enzo comenzó a trabajar en diferentes compañías automovilísticas, hasta que en 1920 se unió a Alfa Romeo, donde estuvo más de 20 años. A partir de ahí comenzó a hacerse muy popular y a ganar varias carreras.

Además de competir en el circuito, trabajaba en la elaboración de los vehículos. En 1929 fundó la Scuderia Ferrari para permitir correr a los pilotos propietarios, creando un equipo de autos y motos.

En 1937 la Scuderia terminó su actividad y dos años más tarde, abandonó Alfa Romeo. Desde ese momento la obsesión de Enzo fue competir contra ellos en un automóvil fabricado por él.

El Ferrari 125 S comenzó a rodar en 1947. Este primer modelo contaba con un motor V12, una fórmula que se convertiría en una seña clásica de la compañía. Con sus primeros autos, Ferrari consiguió ganar la Mille Miglia (1948), las 24 Horas de Le Mans (1949), un Gran Premio de F1 (1951) y un Campeonato del Mundo de Fórmula 1 (1952). Comenzaba así la leyenda de Ferrari.

La Scuderia Ferrari se ha convertido en una de las firmas automovilísticas más reconocidas. Sus vehículos exclusivos y ediciones limitadas son muy populares para coleccionistas y amantes del motor.

El Ferrari y la Fórmula 1

Desde los años 70s, la marca italiana Ferrari ya estaba consolidada como una de las firmas más potentes dentro de las carreras de competición. Su popularidad, la consecución de títulos y la unión con los mejores pilotos del mundo como Niki Lauda hicieron que llegara a la élite en muy poco tiempo.

Pero, la muerte de Enzo Ferrari en 1988 y la venta en casi su totalidad del grupo Fiat causaron la desaparición de la escudería Ferrari de la Fórmula 1 durante unos años. Más en concreto, hasta 1996, momento en el cual regresaría la Scuderia Ferrari a la Fórmula 1 al volante de su nuevo auto y su nuevo piloto: Michael Schumacher.

Desde ese momento en adelante, lo demás es historia del automovilismo. Dominio absoluto en la competición al alcanzar el Campeonato Mundial de Pilotos desde el 2000 hasta el 2004. Además de alzarse con el Campeonato de Constructores desde el 1999 hasta el 2004.

Los Ferraris en Venezuela

La marca Ferrari ha estado en Venezuela desde hace casi 70 años, siendo uno de los primeros países fuera de Italia en el cual la firma estableció presencia oficial. El primer modelo que llegó fue un coupé 195 Inter, adquirido por el empresario Enzo Panchetti y entregado en Caracas en 1952.

Carlos Kaufmann fue un representante oficial de Ferrari en Caracas y aunque no instaló nunca un concesionario en el país, fungía como intermediario entre quienes deseaban adquirir un vehículo y la fábrica italiana, aprovechando su amistad con el creador: Enzo Ferrari.

Entre 1950 y 1960, Kaufmann importó varias docenas de unidades Ferrari al país, incluyendo tres biplazas 250 Testa Rossa originales para los pilotos-empresarios Marcelino “Lino” Fayén, Maurizio Marcotulli y Piero Drogo. También importó tres coupé de tipo 250 TdF para Mauricio Marcotulli, José Miguel Galia y Julio González-Pola, y trajo al menos una unidad del biplaza descapotable 250 GT. Estos modelos están hoy entre los más cotizados por los coleccionistas del mundo y entre los más apreciados por los fans de Ferrari.

En paralelo, el maestro mecánico Félix Varona instaló hacia 1954 el primer servicio autorizado Ferrari en América Latina, el legendario Taller Varona, en un galpón en Boleíta. Allí atendió la mayoría de las unidades importadas por Kaufmann y por particulares.

Cuando Kaufmann falleció en los 80’s, siendo Marco Longinotti-Buitoni, quien en 1992 anunció haber conseguido la representación oficial de la marca para nuestro país y otras regiones de Sudamérica a través de su empresa, Maranello Motors.

El modelo que más identificó a esta etapa de la marca en Venezuela fue el F355, y hubo tantos en el país que en 1996 Maranello Motors organizó el trofeo monomarca Ferrari Challenge Venezuela, primero de su tipo fuera de Italia. De esta competición se realizaron cuatro ediciones entre 1997 y 2000, dándose incluso la circunstancia de que pilotos venezolanos viajaron a Italia a participar en la Finale Mondiale del Challenge Ferrari en cuatro ocasiones.

Con Maranello Motorsport, Venezuela es uno de los siete países de Latinoamérica que tienen una representación oficial de Ferrari. El país latinoamericano con más presencia comercial de Ferrari sigue siendo México, que tiene concesionarios en Monterrey, Ciudad de México y Guadalajara.

Uno de los más conocidos concesionarios Ferrari en Caracas fue el del empresario y piloto Lino Fayén, que operó en Colinas de Bello Monte y luego se mudó a una ubicación más grande y moderna en Los Jabillos, cuando se convirtió en representante Mercedes-Benz.

Maranello Motorsport abrió su primer concesionario en Caracas, en La Ciudadela (Concresa) en 1992.

Años después, Maranello Motorsport mudó sus operaciones comerciales a un local en Altamira, Caracas. Este local había sido armado por el empresario Franco De Vita, quien tras ser concesionario Fiat por muchos años (Italiancar) eligió convertirse en distribuidor de autos de las marcas Ferrari y Maserati hasta ceder el negocio a Maranello Motorsport. 

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